jueves, 11 de febrero de 2016

Sutileza al matar...

Sucede muchas veces que nos quedamos en ese limbo, donde te estancas, no tienes un norte, sin horizonte. Muchas veces renegamos de dicha situación pero es por azares caprichosos que no aceptamos realidades adjuntas, suscritas, impuestas por nosotros mismos.

"No mereces que te vuelvan a hablar."
Así de simple, a veces simplemente nos merecemos y mucho que alguien ya no quiera hablarnos, casi una especie de destierro en la vida de alguien, a veces simplemente lo merecemos y en lugar de preguntarnos retóricamente que fue lo que le paso a esa persona para que simplemente un buen día así de la nada decidiera dejar de hablarnos; en lugar de preguntarnos qué fue lo que le paso, deberíamos tratar de identificar qué fue lo que le hicimos y a esa pregunta la respuesta la tenemos únicamente nosotros.





Pero entendamos que madurar es entender que si alguien te ignora es porque quiere hacerte sentir mal, esta dejando de quererte, o simplemente no le importas. Me inclino por las ultimas tres opciones. No te desanimes quizás muy en el fondo estas cosas son solo simples conceptos agrietados en un corazón desprendido de ofensas y maltratos, suele pasar que nada de esto es verdad y todo sigue un cauce normal y citadino.

jueves, 4 de febrero de 2016

Vivir una vida vacia...

Los primeros días de cada mes se sentían para ciertas personas como fechas alusivas a un buen inicio, dejando de lado los pasados que ya fueron.

La realidad nos brinda hoy, un clima denso sumergido en el mero aburrimiento, obvio nos quejamos todo el tiempo de la rutina pero cuando ya no tienes de que quejarte no te parecería mas aburrido todavía? Irónico no? . 

Créelo pues, estamos en un estado de limbo donde hacer no significada nada y el no hacer es aun mas insignificante que ni se cuantifica ni valora. Donde la televisión, radio ni el Internet pueden aplacar tal sentimiento soporífero.


Ni la familia puede ser un nexo para corromper tal soledad, es quizás una de las cosas que vivimos en la actualidad, la familia a entrado a un estado de confort invertido. No conversan, no conviven, simplemente son espacios aislados dentro de un mismo lugar, ojo no todos son así, pero si la mayoría y eso podemos cuantificarlo por la seguidilla de jóvenes que andan en las calles sin saber que hacer.

Es triste saber que ni uno ni otro puede encontrarse, es como haber perdido los sentidos y somos una especie de zombies que deambulan por las calles, muchas veces he pedido que se venga el apocalipsis, como una epidemia a lo Walking Dead pero sin darme cuenta ya lo estábamos viviendo y al parecer desde hace mucho. 

Es cuestión de infectarme y seguir la corriente o ir contra todo y buscar lo apacible del aburrimiento como medio de no caer en la rutina desesperante de algún "iluminado" que relate mi historia como un Best Seller o un Comic.

Temible soledad, espérame.