Equinoccio

Ayer salio el sol, y con ellos los primeros verdes, los brotes, las flores, los frutos, las mariposas y con el ello el calor que calienta feo. Y todos nos fuimos a dormir convencidos de que la primavera había comenzado. Sin embargo, hoy despertamos tiritando, confundidos, en un invierno gris. “¿Otra vez? ¿Qué pasó? ¿En qué estación estamos?” Es posible que no estemos en ninguna. Tal vez, estamos en una zona de transición, en un breve instante entre la larva y la mariposa, entre el pimpollo y la flor, cuando el ser no es ni una cosa ni la otra.

Para los científicos, que desestiman la sensación térmica y miden temperaturas “objetivas”, este punto indeterminado no es posible y seguimos en invierno. Calculan reloj en mano que el comienzo de la estación en el hemisferio sucederá un 23 de setiembre exactamente a las 6:05 hora peruana, con el fenómeno astronómico denominado equinoccio de setiembre.

Suponen que la naturaleza seguirá comportándose según las regularidades que vienen observando. Pero incluso si es así, congelados en la hora señalada, cuando ni una infinitésima de segundo pase la línea de las 6:05, ¿estaremos en el último instante del invierno, en el primero de la primavera, en ambas estaciones o en ninguna?

Pensar que alguien podria sentirse asi, sentir que lo tiene todo y a la vez sentir que no tiene nada. Hay sucesos naturales que pueden manifestarse de cierta manera inexplicable pero concreta.

Hoy como te sientes, ¿parte de alguien o parte de nadie?